El dragado del Caño Martín Peña: más allá del impacto ambiental.

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El Caño Martín Peña, ubicado en San Juan, es un cuerpo de agua de gran importancia ecológica y social. Históricamente, ha servido como un conector natural entre la Bahía de San Juan y la Laguna San José, desempeñando un papel crucial en el equilibrio del ecosistema y en la calidad de vida de las comunidades aledañas.

Sin embargo, la sedimentación y contaminación han reducido drásticamente su funcionalidad, convirtiéndolo en un reto ambiental y comunitario. El dragado del Caño Martín Peña ha sido una solución propuesta desde la década de 1980, con el objetivo de convertirlo en un cuerpo de agua navegable. Sin embargo, los esfuerzos iniciales desplazaron a comunidades y no resolvieron el problema en su totalidad.

En 2004, se retomó el proyecto, y en 2007 se condicionó su autorización a un estudio de viabilidad que confirmara su impacto ambiental positivo y su interés público. Tras más de una década de estudios y planificación, en 2022 se firmó el acuerdo final entre el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos y la Corporación del Proyecto ENLACE del Caño Martín Peña y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (como co-patrocinadores), para dar inicio a la construcción. Este logro fue el resultado de la organización y lucha comunitaria.  

El Proyecto de Restauración del CMP (CMP-ERP) busca restaurar la conexión entre la parte este y oeste del estuario mediante el dragado y canalización de aproximadamente 2.2 millas del CMP. Este esfuerzo reducirá la vulnerabilidad a inundaciones de aproximadamente 14,000 residentes y protegerá infraestructuras críticas, como el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín, que recibe 9 millones de visitantes anuales. 

Algunos beneficios ambientales con impacto positivo en el entorno ambiental y urbano serán: 

  • Restauración del ecosistema de manglares.
  • Rehabilitación del flujo de agua, mejorando su calidad y la biodiversidad.
  • Reducción del riesgo de inundaciones en las comunidades cercanas.

Además, la calidad de vida de los residentes mejorará significativamente, ya que su restauración facilitará un acceso más seguro al agua y disminuirá los problemas de saneamiento que afectan la salud pública. Además, la siembra de mangles y la creación de espacios recreativos son iniciativas que fortalecerán la relación entre las comunidades y su entorno natural. 

Si bien existen riesgos ambientales, como el posible desplazamiento de sedimentos, estos serán manejados a través de un monitoreo adaptativo que garantizará la sostenibilidad del proyecto durante los próximos 50 años. 

Del punto de vista técnico, el proyecto de dragado se divide en tres contratos principales que contemplan: 

  1. Remoción de material vegetativo y desechos: Como parte de este contrato, en el 2023 se removieron aproximadamente 40 acres de material vegetativo acuático y terrestre, y aproximadamente 18,800 toneladas de escombros y basura de los márgenes del CMP.
  2. Protección de puentes: Se implementarán medidas para garantizar la estabilidad estructural de los puentes Martín Peña, Tren Urbano y Muñoz Rivera debido al cambio en la velocidad del flujo de agua.
  3. Excavación y estabilización: Dragado y canalización del CMP, área de trabajo temporera en Ciudad Deportiva Roberto Clemente, siembra de 34.46 acres de bosque de mangles y componentes recreativos, entre otros.

El financiamiento del proyecto proviene de fondos federales y estatales, obtenidos tras años de gestión comunitaria y gubernamental. Entre los mayores retos técnicos se encuentran las alzas en los costos de construcción.

Participación Comunitaria y Social

“Uno de los aspectos más destacados del proyecto ha sido multiplicidad de esfuerzos y la movilización comunitaria, que ha jugado un papel fundamental en la planificación y ejecución. Desde la firma del acuerdo con el Cuerpo de Ingenieros, se han realizado rondas de asambleas comunitarias, manifestaciones y múltiples esfuerzos de concienciación a través de redes sociales y otros medios de comunicación. La representación comunitaria se ha dado desde la participación ciudadana y su compromiso en todos los procesos ha sido notable. Me gusta mucho este esfuerzo desde la perspectiva gubernamental…es un proyecto radical y no típico. La existencia del Fideicomiso de la Tierra que protege a las familias y el compromiso a nivel social, destacan el proyecto de restauración como uno muy importante y significativo en Puerto Rico”, expresa con orgullo y satisfacción, la licenciada Estrella D. Santiago Pérez, Gerente del Área de Asuntos Ambientales. 

El dragado del Caño Martín Peña representa una oportunidad única para transformar la calidad de vida de miles de personas, restaurar un ecosistema clave y dinamizar la economía local.  

 Los residentes han expresado preocupaciones sobre la reubicación, la preservación de la identidad cultural de sus barrios y el acceso equitativo a los beneficios del proyecto. Para abordar estas inquietudes, se han implementado programas de apoyo y mecanismos de co-manejo de zonas marítimo-terrestres, asegurando que la comunidad tenga voz en la gestión de los recursos naturales. 

“Iniciativas como los Patrulleros y Patrulleros(as) del Ambiente y Estudiantes Dispuestos a la Restauración Ambiental buscan involucrar a los jóvenes en el manejo sostenible del agua y los desechos, fomentando una cultura de conservación a largo plazo”, añade la licenciada Santiago Pérez. 

 Beneficios Económicos del Dragado del Caño Martín Peña (según el Estudio de Viabilidad 2016) 

A nivel económico, el dragado generará: 

  • 4,275 empleos directos e indirectos en la construcción.
  • $23.95 millones en ingresos gubernamentales derivados de la construcción.
  • $97.72 millones en salarios asociados a las obras.
  • Un beneficio económico anual estimado de $6.72 millones por las nuevas instalaciones recreativas del proyecto.

En resumen, el dragado del Caño Martín Peña no solo mejorará las condiciones ambientales y sociales de la zona, sino que también tendrá un impacto económico significativo, generando empleos para los residentes, fortaleciendo los comercios locales y nuevas oportunidades de desarrollo ecoturístico y recreativo en San Juan. 

José K. Bauzá Mora, Gerente del Área de Desarrollo Económico Comunitario, explica que “existe un Diseño Plan Maestro que se desarrolló de manera participativa para proponer el futuro desarrollo de la entrada de Barrio Obrero, el cual complementa al Plan Maestro de Infraestructura que se desarrolló en el 2021. El Diseño Plan Maestro de la entrada de Barrio Obrero, propone la entrada de las comunidades como centro de bienvenida y punto de contacto para recibir y orientar a los visitantes sobre los negocios y actividades recreativas que fomenten el ecoturismo tales como: 

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  • Paseos peatonales, carriles de bicicletas y plazas que fortalecerán la economía local a través de eventos, mercados agroartesanales y recorridos guiados e interpretativos.
  • Desarrollo de un Corredor Ecoturístico que integre deportes acuáticos como kayaks, paddleboards y botes de pedal, opciones de hospedería, entre otros.
  • Establecimiento de un Comité que vele por el cumplimiento legal y sostenible de los negocios, para que sus servicios operen en armonía y consideración con el ambiente y la comunidad.”

Se espera que este gran proyecto de restauración impulse un nuevo circuito ecoturístico en San Juan, conectando desde el Puente Moscoso hasta Piñones y Cataño. Este desarrollo no solo beneficiará a los residentes, sino que también atraerá inversión y oportunidades de empleo, consolidando un modelo de sostenibilidad urbana y ambiental sin precedentes en Puerto Rico. 

El dragado del Caño Martín Peña representa una oportunidad única para transformar la calidad de vida de miles de personas, restaurar un ecosistema clave y dinamizar la economía local. Gracias a la lucha comunitaria y el respaldo de entidades gubernamentales y ambientales, este proyecto avanza hacia un futuro más equitativo y sostenible para San Juan. 

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